¿Por qué no debes comprar algunos productos en Internet? A veces porque nadie nos puede garantizar los métodos para conservar y preservar los productos que se venden en las tiendas on-line, y otras para evitar comprar falsificaciones. Aquí traemos cuatro ejemplos:
1. Los fármacos que se venden sólo con receta.
Piensa que si se venden sólo con receta médica por algo será. Es probable que su consumo deba estar sujeto a algunas reglas, que tenga efectos secundarios o que pueda interactuar negativamente con otros medicamentos. En cualquiera de estos casos, un médico es quien debe asegurar de que eres apta para tomar ese fármaco y, sobre todo, decidir si lo necesitas o no.
2. Los suplementos y pastillas para perder peso.
Hay cientos de ellos que se venden on line y prometen el oro y el moro, pero realmente es difícil saber qué esta uno realmente comprando en Internet. En un examen que realizó la FDA, el organismo estadounidense que regula la seguridad y aprobación de los fármacos , se comprobó que la mayoría de los suplementos, incluso los que estaban hechos con hierbas medicinales, tenían también componentes ocultos que eran poco seguros. Algunos no estaban aprobados por este organismo y otros, simplemente tenían efectos que no eran los que se aseguraba en el prospecto. Por ejemplo, comprobaron que muchos suplementos para perder peso contenían una gran cantidad de cafeína y funcionaban como estimulantes del sistema nervioso, una circunstancia que puede ser peligrosa para las personas con una enfermedad del corazón. Aunque el estudio se realizó en Estados Unidos con suplementos que se venden allí resulta útil estar informado porque Internet es un mercado global.
3. La leche materna.
En algunos países la venta de leche maternal en Internet está aumentando, sin embargo no es un recurso seguro y de momento es un mercado que está sin regular y nadie puede garantizar en qué condiciones se conserva la leche ni su calidad. La revista Pediatrics publicó un estudio con doce ejemplos de leche materna comprados en Internet y comprobó que en el 10% de los casos se trataba de leche de vaca.
4. Los productos con hormonas.
Si te sientes tentada a comprar fármacos que contienen hormonas porque te aproximas a la menopausia como cremas, geles o suplementos que promete mejorar tu vida sexual, es mejor que consultes al ginecólogo antes de hacerlo. El problema con estos fármacos es que muchos no tienen las dosis ajustadas o que las personas los toman sin consultar con un profesional cuáles son las dosis seguras. Además, tomar hormonas en exceso tiene consecuencias como el crecimiento de pelo en lugares indeseados o el agravamiento de la voz.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario